Conviviendo con una familia japonesa

Como es usual, el Sr. Masao organiza paseos guiados una vez al mes especialmente para estudiantes extranjeros. A mi en lo personal me agrada mucho por varias cosas. La primera es porque varias veces son lugares que difícilmente podrías conocer por tu cuenta por no saber de su existencia, ya que aquí en Japón hay demasiados lugares escondidos en los rincones que menos te imagines y que la verdad valen mucho la pena visitar. La segunda es que por las características de esta ciudad  las ciudades cercanas, la movilidad es un poco difícil si no cuentas con un automóvil, y como estudiante que viene por 6 meses, o posiblemente 2 años, un automóvil no es algo que todo mundo pueda adquirir fácilmente, o no sea conveniente porque el tiempo de estancia es corto. La tercera es que ellos conocen los lugares y te pueden proporcionar mucha mas información de la que tu podrías adquirir por tu cuenta en una sola visita, y como se hace de una manera guiada, todo ocurre mas rápido y puedes aprovechar mas el tiempo.

En esta ocasión nos llevaron a ver un lugar donde plantan unas flores particulares. Estos lugares son sorprendentes, no se si solamente soy yo que a lo mejor no estoy acostumbrado a estas cosas, o en general a todos los japoneses les encanta todo esto. Es bonito, relajante y sobre todo limpio.

En esta ocasión nos acompañaron Leo, Xiang y una chica francesa que conocimos en el anterior viaje con Masao, y que ahora se nos unirá cada vez que sea posible. Ella vive en Nagoya, y también vino por un periodo corto de tiempo.

Cerca de aquel lugar, había un templo pequeño. Aquí hay esos tipos de templos casi en todos lados, muchas veces. Es tan común como ver centros comerciales, aunque mucho mas pequeños, pero si hay bastantes, y pueden estar dentro de la ciudad, junto a grandes edificios, en frente de las escuelas, en lugares aislados como esté, y prácticamente en cualquier lugar.

También habían caballos en aquel lugar. Según tengo entendido, ver caballos en Japón es algo super raro, nada común. Recuerdo que se tomaron fotos con los caballos, algo que no se me hace raro pero tampoco se me hace muy usual si estuviéramos en México. Existe la opción de montarlos por cierto precio, pero se me hizo un poco caro y el recorrido no era mas que ida y vuelta por un camino de unos 20 metros.

Mas tarde fuimos a nuestro siguiente destino, un puente! ¿Qué tiene de especial este puente? Que no esta terminado.. y nunca lo estará! Del otro lado del puente hay una escuela, y el puente debería de atravesar el río para que los estudiantes puedan cruzar al otro lado, pero me dijeron que resultaba muy caro y a final de cuentas decidieron no terminar de construirlo. Lo que hicieron en lugar de eso es poner dos botes con una persona encargada de controlarlo PARA SIEMPRE! Bueno, no es que este las 24 horas, pero esta contratado para hacer eso, así que debe de estar ahí un buen rato... Jamás imagine que hubiera un trabajo de ese estilo, pero resulta entretenido. Al final, además de su función original, tiene la función de "destino turístico" o algo así, porque supongo que por eso estábamos ahí jaja!

Después de eso, el viaje del día estaba terminado! ¿¡Pero qué!? ¿Por qué tan pronto? Aunque no pareciera ya eran alrededor de las 4 pm, pero eso aun era algo temprano, así que nos fuimos a la casa de una familia japonesa usualmente se unen a estos viajes guiados. De ahí nos fuimos unos cuantos a continuar con la diversión a su casa.

Llegando, empezaron a preparar unas cosas para comer. Rumiko, que es la madre de los 3 chiquillos, iba a preparar unas cuantas cosas para comer, y la chica francesa que se llama Emy, se ofreció para preparar crepas. A Rumiko le encantan las cosas occidentales así como a mi me encantan las cosas orientales. Siempre me enseña la música o los artistas que le gustan y al parecer sus favoritos son One Direction y una chica llamada Ariana (o Ariadna?) Grande. Cuando ella me enseña esas fotos yo le enseño las de Sayumi :D

Ese día comimos Nagashi Soumen en la versión casera, ya que hay una versión que es con una fila larga de bambú de varios metros por la que corren los fideos y los vas tomando en el camino. Nosotros comimos con una maquinita que le empieza a dar vueltas a los fideos, y los vas pescando cuando pasen por tu lado. Algo que me sorprendió es que se comen fríos, y constantemente les vi echándole hielos al agua para enfriar un poco mas, y si no mal recuerdo es algo típico de verano.

Entonces, le pones tus fideos, un poco de tempura, unas cuantas hierbitas y una salsa especial...

Y al final es así como queda! Fue un poco raro el comer los fideos fríos, pero después de los 2 o 3 bocados que te acostumbras, lo empiezas a disfrutar!

Al terminar de comer, Rumiko empezó a sacar disfraces del armario. Jamas había visto tantas pelucas, mascaras y disfraces en una casa. Resulto de lo mas divertido ver cada una de las cosas que había dentro de ese armario y empezar a tomar un buen de fotos!

Panda!

Panda con pose japonesa para foto

Esta me dio un buen de risa! Algo fuera de lo kawaii

Panda mandando besos

Bienvenida de panda

Un gorrito de tigre

Un gorro de pastel de cumpleaños con velas en la parte de arriba

Gorro de Onigiri! Jamas se me hubiera ocurrido! Sería como hacer un gorro o disfraz de taco en México

Traje de berenjena, algo muy común en Japón

Después se unió Emy a las fotos, y Rumiko con el gorro de reno

A la izquierda el de rana super kawaii y el del centro es disfraz de "Dani"

De nuevo disfraz de Dani

 Y así había muchas fotos mas. Hace mucho tiempo que no me había divertido tanto tomando muchas fotos! Resulta genial todas las curiosidades que un japones guarda en su casa, ademas de que saben como agregarle la diversión y animar todo. Esta familia en especial es muy acogedora y les encantan tener visitas, conocer extranjeros, hacer muchos amigos y asistir a muchos eventos. Leo recientemente me dijo que Rumiko siempre esta en todos los eventos existentes en Toyohashi, y con todas las fotos que publican en Facebook se ve que se la pasan de maravilla. Definitivamente es una familia super genial y paso ratos muy agradables con ellos. Simplemente me siento como en casa al estar con ellos.

 El disfraz de panda fue la sensación. También una de estas la ocupe de foto de perfil porque el panda simplemente era genial. Ojala me lo pudiera llevar, pero tal vez algún día conseguiré mi propio panda.

Al terminar la sesión de fotos, Rumiko, su hija Sayumi y una amiga llamada Makino nos enseñaron un baile que frecuentemente presentaban en algunos eventos en la ciudad junto con otro gran numero de personas. El baile me resulto muy agradable, energético y sobre todo coordinado. Es algo que me traerá buenos recuerdos cada una de las veces que lo vuelva a ver.

Después de aquella interesante demostración, nos pusimos a jugar un rato ping pong o table tennis. Es impresionante toda la cantidad de cosas que se pueden tener en una casa si las cosas están correctamente diseñadas para espacios limitados. Eso es algo que me encanta del estilo japones de las cosas, que usualmente son ingeniosas y aprovechan espacio. Aquí he descubierto muchas cosas que me hubieran resultado muy practicas en México en muchos momentos.

De verdad pasé un gran día al lado de estas personas. No son simplemente amables como todos los japoneses, sino que tienen algo especial que te hacen sentir como en casa. Este día sera uno de esos días que te quedan como recuerdo para siempre, y un recuerdo de los mas especiales en Japón.